Agentes de la Guardia Civil y de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, en el marco de la operación Lopi, han desarticulado un centro de producción de marihuana perteneciente a una organización criminal internacional en la localidad de Molvízar.

En esta operación ha sido detenido hasta el momento un joven albanés, de veintiún años de edad, sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de pertenencia a organización criminal, de un delito contra la salud pública por cultivo y tráfico de droga, de un delito de tenencia ilícita de armas y de un delito de defraudación de electricidad.

En la fase de explotación de la operación, los agentes se han incautado de 785 plantas de cannabis sativa en diferentes estados de crecimiento para asegurarse una producción continuada de marihuana a lo largo del año; de 45 gramos de marihuana y de una pistola detonadora modificada para que disparase fuego real.

El pasado mes de octubre los investigadores de la Guardia Civil de Salobreña localizaron este centro de producción de marihuana en las afueras de la localidad de Molvízar que pertenecía a una organización criminal con ramificaciones en Albania, al frente del cual estaban dos ciudadanos albaneses. Iniciaron una investigación y comprobaron que agentes de Vigilancia Aduanera de Motril también investigaban a los mismos sospechosos, por lo que, puestos en contacto unos investigadores y otros, decidieron aunar esfuerzos en las pesquisas que aún quedaban por delante.

Una vez que consiguieron las pruebas concluyentes, los agentes solicitaron autorización al juzgado de Primera Instancia e Instrucción número cuatro de Motril para registrar la vivienda sospechosa.

En el dispositivo de la Guardia Civil participaron agentes de la Compañía de Motril, del Grupo de Acción Rápida de la Guardia Civil, de la Unidad de Seguridad Ciudadana, del Servicio Cinológico, del equipo Pegaso y de la Unidad Aérea de la Comandancia de Granada y del equipo de Policía Judicial de Almuñécar, junto con los agentes de Vigilancia Aduanera de Motril y operarios de la compañía eléctrica.

El joven detenido, al percatarse de la presencia de los agentes abandonó la vivienda y huyó a la carrera por el monte pero fue alcanzado y detenido.

Los agentes registraron la vivienda y encontraron 185 plantas en estado de media floración y otras 600 que aún no tenían flores, lo que aseguraba una producción continuada de marihuana a lo largo de los próximos meses. También localizaron 48 gramos de marihuana, dos bolsas con semillas de cannabis sativa y una pistola detonadora Reck Gas P6 modificada con un cañón estriado de calibre 6,35 para que pudiese disparar fuego real.

Los operarios de la compañía eléctrica certificaron la existencia de dos dobles acometidas ilegales a la red eléctrica, una monofásica que marcaba en la medición 71 amperios y otra trifásica que consumía 87, 47 y 64 amperios respectivamente.

El arma intervenida ha sido enviada a los laboratorios de Criminalística de la Guardia Civil para su estudio.

La operación continúa abierta y la Guardia Civil mantiene las pesquisas para localizar y detener al otro implicado, sin que se descarte la posibilidad de realizar más detenciones.

El detenido ha ingresado en prisión.