ASAJA Granada llevará a la calle su propuesta para 'Salvar el cereal' este jueves
Lo hará con una mesa informativa en Puerta Real, de 11:00 a 13:00 horas, alertando sobre el riesgo que supone la propuesta de reforma de la PAC post 2028 tanto para agricultores y ganaderos como para los consumidores
ASAJA Granada ha convocado una acción de protesta el próximo jueves, 24 de julio, a partir de las 11:00 horas hasta las 13:00 horas, en Puerta Real, con el objetivo de denunciar la grave crisis que atraviesa el cultivo del cereal en la provincia y exigir medidas urgentes a las administraciones. Durante la jornada se instalará una mesa informativa, se repartirá un manifiesto y se recogerán firmas de apoyo de la ciudadanía. Además, la lectura del manifiesto será emitida por altavoz para hacer llegar el mensaje al conjunto de la población y los organizadores vestirán camisetas con el lema 'Donde hay cereal hay campo. Donde hay campo hay futuro'.
De esta manera, quiere advertir de que el cultivo de cereal ha dejado de ser viable económicamente, dado que el precio que recibe el agricultor (0,19 €/kilo, igual que hace cuarenta años) no cubre los costes de producción actuales (760 €/ha), lo que obliga a muchos productores a trabajar a pérdidas. Denunciará, asimismo, que los costes siguen aumentando, especialmente por el encarecimiento de los fertilizantes y dejará constancia de que el cereal en Granada no es solo una actividad agrícola sino que forma parte del paisaje rural, sostiene la ganadería extensiva y es esencial para la biodiversidad.
Con esta acción, pretende visibilizar la situación crítica del cereal en la provincia granadina y movilizar tanto a la ciudadanía como a las administraciones para evitar el abandono de un cultivo estratégico para el medio rural. Además, alertará del riesgo que supone tanto para los agricultores y ganaderos como para los consumidores la reforma de la PAC post 2028, que amenaza con recortes del presupuesto, renacionalización de las políticas agrarias y pérdida de la soberanía alimentaria. Según ASAJA, provocaría que se abandonen muchas explotaciones y los ciudadanos verían incrementados los precios y perderían acceso a productos frescos, saludables y asequibles.
