El Grupo de Montaña y la Unidad Aérea de la Guardia Civil de Granada realizaron dos rescates en Sierra Nevada ayer domingo, 28 de abril. Se trata de un joven montañero onubense que se quedó enriscado en las inmediaciones del Mulhacén y el de una senderista granadina que sufrió un esguince en los Lavaderos de la Reina.

El primer rescate comenzó sobre las 12:10 horas. El Servicio de Emergencias de la Junta de Andalucía, el 112, alertó a la Guardia Civil de que un montañero que se dirigía junto con otros dos amigos desde el refugio de la Caldera hasta la Hoya del Portillo, había sufrido un accidente en la zona del Paso de los Franceses, cerca del Mulhacén. El montañero resbaló y cayó. En un primer momento consiguió detener la caída con una navaja, pero las fuerzas no le aguantaron y se precipitó por una ladera de nieve helada resbalando unos doscientos metros. Afortunadamente no se encontró con ninguna roca en la caída, lo que posiblemente hubiera supuesto un desenlace fatal, y solo sufrió algunas magulladuras.

La Guardia Civil activó inmediatamente a dos agentes del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña y a dos pilotos de la Unidad Aérea de Granada. El helicóptero solo pudo acercar a los especialistas del Servicio de Montaña hasta el refugio de Poqueira por culpa de la climatología, unos cuatrocientos metros más abajo del lugar donde se encontraba la víctima.

Los dos especialistas caminando llegaron hasta el lugar del accidente. Se entrevistaron con los acompañantes del herido y posteriormente con éste por teléfono. Una vez que les confirmó que solo estaba magullado, los agentes descendieron hasta donde se encontraba el montañero accidentado, comprobaron que efectivamente podía andar y le dieron ropa de abrigo y material para que pudiera progresar en el camino de vuelta encordado con seguridad.

Mientras uno de los especialistas comenzó su andadura con este montañero, el otro guardia civil subió hasta donde se encontraban sus dos compañeros para ayudarlos también a salir. Una vez todos juntos, descendieron unos ocho kilómetros hasta donde un guardia civil del Servicio de Montaña de Granada esperaba con un coche patrulla, ya que el helicóptero no pudo volver a entrar. En los puntos más difíciles del recorrido de vuelta, la Guardia Civil encordó a los tres jóvenes montañeros para evitar nuevos accidentes. Sobre las 18:20 horas los agentes de GREIM dejaron a los jóvenes onubenses en la Hoya del Portillo junto a su coche.

Rescate en los Lavaderos de la Reina

Mientras todo esto ocurría, sobre las 15:00 horas de ayer, el Servicio de Emergencias de la Junta de Andalucía, el 112, alertó nuevamente a la Guardia Civil de que una mujer, de sesenta años de edad, que se encontraba realizando una ruta por los Lavaderos de la Reina, había tropezado y había sufrido un esguince de tobillo.

La Guardia Civil activó a los especialistas del GREIM que se encontraban en la estación de esquí de Sierra Nevada en servicio de orden público, ya que los otros especialistas estaban en el anterior rescate.

En un primer momento se dudó si realizar el rescate con el helicóptero por la mala climatología, estaba nevando y había niebla. No obstante, los agentes llamaron a la persona que había reclamado la ayuda de la Guardia Civil y ésta le dijo que en los Lavaderos de la Reina no había niebla y la visibilidad era buena.

El helicóptero de la Guardia Civil recogió a los especialistas del Servicio de Montaña en Haza Llana y se dirigieron hasta el lugar del accidente. Los pilotos de la aeronave hicieron un apoyo parcial a pocos metros de la mujer herida y los dos agentes del GREIM bajaron, la cogieron en brazos y la introdujeron rápidamente en el helicóptero, antes de que la niebla, que bajaba rápidamente, se les echara encima. La mujer fue evacuada al hospital Clínico de Granada.