El Ayuntamiento de Salobreña ha celebrado en la mañana de hoy, 23 de diciembre, en el auditorio de la Villa sendos plenos extraordinarios para rendir homenaje a dos personas muy queridas en el municipio. Se trata del recientemente fallecido Antonio Luis Gallardo Medina, que ha sido nombrado Hijo Predilecto a título póstumo, y el ex párroco Francisco Lombardo, que ha sido reconocido como Hijo Adoptivo de la Villa.
Antonio Luis Gallardo Medina falleció el 30 de julio de este año y en un pleno celebrado el último 3 de septiembre se acordó por unanimidad iniciar los trámites para nombrarlo Hijo Predilecto de Salobreña, con la idea de darle también su nombre a una calle del municipio. El alcalde de la Villa, Javier Ortega, ha hecho un repaso de su vida y ha señalado la constante defensa de Salobreña por parte de este vecino en sus cientos de cartas al director publicadas en diferentes medios. Tras someterlo a la votación de la corporación, la iniciativa ha salido adelante por mayoría y se le ha entregado la placa conmemorativa a una de sus hijas.
La otra distinción honorífica, por iniciativa popular, ha recaído en Francisco Lombardo Valverde, quien fue párroco de Salobreña durante más de dos décadas, entre 1977 y 1998. El alcalde ha leído la documentación incluida en el informe técnico que avala este reconocimiento, donde se destaca que “siempre ha estado al servicio de los ciudadanos de Salobreña y de cualquiera que le pidiese ayuda, por lo que es una persona muy respetada, entrañable y querida por todos, incluso los que no son feligreses suyos”.
Aunque con dos abstenciones, la propuesta ha sido aprobada por el pleno y se le ha hecho entrega de la placa de 'Hijo adoptivo' al párroco, quien se ha mostrado muy emocionado por este honor.