El Juzgado de Motril ha dado la razón a las trabajadoras de Servicios Sociales en su denuncia de desigualdad salarial respecto a compañeros de otras áreas con la misma categoría laboral.

Este hecho, del que era consciente el gobierno municipal desde hace años, se ha ido postergando en el tiempo y, además, incumpliendo el compromiso del equipo de gobierno con las trabajadoras.

En el pleno de 27/7/17, en el debate del punto “Plan de igualdad para las empleadas y empleados del Ayuntamiento de Almuñécar 2017-2018”, Izquierda Unida presentó una enmienda en la que mostraban su preocupación porque “el Plan de Igualdad 2015/16 había quedado en papel mojado al no dotarse del mecanismo reglamentario que eliminara la discriminación salarial”.

Izquierda Unida pedía que se llevara a cabo una equiparación de salarios entre los diferentes trabajadores en función de su relación laboral con el Ayuntamiento y, en ese aspecto, ponía de manifiesto que la equiparación podría llevarse a cabo de forma inmediata, ya que había suficiente presupuesto en la partida de personal al no haberse convocado las plazas de la oferta pública de empleo y si estar presupuestadas. Asimismo, había numerosas jubilaciones de personal que no habían sido cubiertas, con lo que también existía un remanente de crédito.

Izquierda Unida decía que la equiparación de salarios debería realizarse de manera inmediata tras la aprobación del Plan de Igualdad y el pago retroactivo, desde el 1 de enero de 2017, de las retribuciones que había dejado de percibir cada trabajadora ante el incumplimiento del Plan de Igualdad 2015/16. Asimismo, IU pedía que se tuviera en cuenta en los próximos presupuestos la partida necesaria para hacer cumplir el Plan.

Desde la coalición de izquierdas recuerdan que el portavoz del PP en aquel pleno manifestó que “ese acuerdo ya está tomado por parte de la alcaldesa, que tuvo una reunión con las trabajadoras. Las trabajadoras presentaron el escrito a la Comisión de Igualdad. Que se le ha dado, además, traslado a Recursos Humanos para su aprobación en la próxima Junta de Gobierno Local. Por lo tanto, es un acuerdo que ya se ha tomado, un compromiso que la alcaldesa tomó con las trabajadoras, además con carácter retroactivo. Con lo cual, nosotros vamos a votar en contra de la Enmienda porque no tiene sentido tomar un acuerdo que ya se ha llegado a un compromiso con las trabajadoras. Muchas gracias”.

La enmienda fue rechazada con los votos del gobierno municipal. Dos años después, señalan desde IU, no sólo no han cumplido el acuerdo, sino que ha tenido que dictaminar un juzgado que se estaba produciendo una situación injusta de discriminación salarial.

“Engañaron a las trabajadoras y mintieron al pleno. Es intolerable la situación que han provocado. Una muestra más de desigualdad entre hombres y mujeres que ratifica lo lejos que están de practicar políticas de igualdad, más allá de celebrar el 8 de marzo en la puerta del ayuntamiento”, señala Fermín Tejero.

Desde Izquierda Unida lamentan que el equipo de gobierno, en vez de acatar la sentencia, haya recurrido la misma.

IU felicita a las trabajadoras por su lucha y espera que finalmente el ayuntamiento, con una nueva sentencia o con un nuevo equipo de gobierno, asuma sus obligaciones para con estas mujeres. El Ocho de marzo, cuando la alcaldesa salga a la plaza del ayuntamiento con sus lacito, se lo volveremos a recordar.