Tradiciones, rituales y curiosidades. Todo sobre la fiesta que da la bienvenida al verano
Con San Juan se inicia oficialmente la temporada de verano. Pero sepamos algo más sobre esta celebración
¿Conoces todo sobre la fiesta de San Juan? A pesar de que Almuñécar es un municipio que recibe a miles y miles de personas en estos días, muchos de ellos no están al tanto del origen ni de las tradiciones y supersticiones que recoge esta noche tan especial.
Coincidiendo con el solsticio de verano y considerándose la noche más corta del año, la costa granadina se prepara cada año para acoger a miles de personas que pretenden disfrutar de una celebración mágica en la que diversión y superstición van cogidas de la mano.
¿Por qué se celebra la noche de San Juan?
Las raíces de la noche de San Juan se alargan en el tiempo. El origen de esta fecha es de carácter pagano y se fundamenta en la llegada de una nueva estación del año, el verano. Además, la superstición indica que este día es el idóneo para ahuyentar a las malos espíritus y atraer a los buenos así como liberar diversos encantamientos.
Así mismo, con la entrada del cristianismo, la noche de San Juan siguió latente pero librándola de su carácter mágico. Según los textos sagrados, Zacarías mandó encender una hoguera para anunciar a sus parientes el nacimiento de su hijo, Juan Bautista, que coincidía con la noche de solsticio de verano.
Costumbres y curiosidades con un toque mágico
La noche de San Juan es un momento en el que se da cabida a todo tipo de rituales para atraer a la buena suerte.
Uno de los más conocidos, sin duda, es saltar la hoguera. El fuego es el gran protagonista de esta festividad y las playas sexitanas se llenan de luz gracias a la gran cantidad de fogatas que se reparten por todo el perímetro costero tanto de carácter público como privado. Se piensa que quien salte quedará protegido durante todo el año.
Sin embargo, existen ritos más seguros y significativos que los asistentes de las playas pueden realizar. Quemar algo viejo – fotografías, cartas o incluso los apuntes del curso pasado - de lo que queramos evadirnos, simbolizando el inicio de una nueva etapa sin malas energías o quemar un papel en el que se haya escrito algún deseo que se quiera alcanzar.
Esta noche gira en torno a la exaltación del fuego y, según señalan algunos: “su fin no sólo es rendir tributo al sol, sino también purificar los pecados del hombre”.
Pero, este no es el único protagonista ya que el agua, a pesar de ser su antítesis, es también un componente imprescindible para aquellos que disfrutan de San Juan en las playas de Almuñécar. A las 00.00, todo el mundo corre hacia el mar para lavarse la cara y así estar más guapo un año más aunque, eso sí, el deseo se esfuma si te miras al espejo antes de que amanezca.
Para los valientes que quieran eliminar las energías negativas de su vida deberán entrar en el agua y saltar nueve olas dando la espalda. También, las que estén pensando en ser mamás deberán sumarse a este reto ya que la leyenda considera que esto es garantía de fertilidad.
Así mismo, algunos mitos menos conocidos indican que en el momento exacto en que el Sol ilumina el amanecer del día 24, las aguas de fuentes y arroyos están dotadas de poderes especiales para curar y brindar protección a la gente y otras que revelan que quien madrugue este día no pasará sueño el resto del año. Respecto al amor, la noche de San Juan también concibe rituales como que todos los solteros y solteras que al comenzar el 24 se asomen por la ventana de su casa verán pasar al amor de su vida.
Sabores únicos en una noche peculiar
Como no podía ser menos, la gastronomía siempre es una gran acompañante en estas señaladas fechas y, Almuñécar cuenta con un producto típico propio de la zona que, a día de hoy, se ha ido extendiendo por multitud de zonas españolas.
Las panaderías locales se preparan cada 24 de junio para atender a cientos de personas que demandan los bollos de San Juan o también conocidos como “bollos de aceite”. La peculiaridad de este producto es que se les añaden uno o varios huevos en su interior. Un placer para el paladar que todos los visitantes de la ciudad en estas fechas desean degustar cada año.
Hasta nuestros días, esta festividad ha sido motivo de celebración en la costa granadina y los visitantes han seguido muchas de las tradiciones e influencias que se han dado desde tiempos remotos.
En definitiva, magia, superstición, fuego y agua se unen para hacer de esta noche un momento inigualable que solo se repite cada 365 días.