La noche se vistió de fiesta para celebrar en Aquanoche una animada pero íntima fiesta de verano, en la que no faltaron las actuaciones de jóvenes gimnastas sexitanas, la voz de un cantante herradureño que hizo las delicias de los asistentes, y hasta los fuegos artificiales.
Su propietario, Vicente Barbero, quiso celebrar esta fiesta para rodearse de su equipo, de su familia y amigos, y poder agradecer veinte años de apoyo y fidelidad.
Aunque reconoció que tras anular la concesión de la discoteca, con una inversión de más de 1 millón y medio de euros, "pasamos momentos muy duros y difíciles", también destacó que estos últimos cuatro años en los que se ha rodeado de su gente y de un equipo de plena confianza, destacando a su familia y a su mano derecha Puri Najarro, "todo ha dado un giro y hemos afrontado una nueva etapa con mucha ilusión y optimismo".
Vicente Barbero también recordó con cariño la época en la que compartía sociedad con Javier Loma, pero insistió en que esta, "la que estoy viviendo ahora, es una etapa especial que estoy disfrutando a base de trabajo y mucha dedicación", palabras que dijo emocionado acompañado en el escenario por su primer nieto, que no quiso despegarse ni un momento de su abuelo.
Aquatropic, un parque acuático único en Andalucía de agua salada y con una ubicación inmejorable junto al mar, que ayer daba esa fiesta "que hace tiempo quería dar y no podía, para poder deciros gracias por estar ahí siempre".